martes, 22 de marzo de 2011

22 de marzo. ALABAR, BENDECIR, PREDICAR

Nada más empezar la mañana, tras la eucaristía, me he encontrado un video con una versión del “ Magnificat dominicano” que me ha encantado.
El cántico evangélico es uno de mis pasajes preferidos del evangelio; la adaptación a la espiritualidad dominicana muy buena y la versión actual y muy bien interpretada… así que me he dejado seducir y me he pasado el día escuchándolo una y otra vez…¡hasta lo he colgado en el Facebook!
Junto al “hallazgo”, la experiencia de esta mañana; junto a alguien muy especial y querido para mí. Hemos compartido la vida, con las alegrías, los progresos, los problemas,  miedos e inquietudes, pero sobre todo, nos hemos dejado sentir e iluminar por Dios.
Esto ha reforzado el eco del himno de María, la alabanza en medio de la incertidumbre a un Dios que nunca nos suelta de la mano; que hace obras grandes con nosotros, en nuestra vida, que nos llena de bendición y –de forma misteriosa- hace brillar su justicia en el mundo.
Por mal que se nos pongan las cosas, por muy cuesta arriba que resulte el camino, no podemos dejarnos vencer por la desesperación; lo más importante nunca nos faltará.
Nuestro dolor nunca es deseado por el Señor. NO, ni nos lo manda, ni nos castiga, ni nos prueba; pero sí es cierto que desde Él, no sólo podemos superar cualquier padecimiento, sino que además es posible que encontremos crecimiento, aprendizaje y grandeza en nuestro sufrir. Así ganamos la partida, es como Dios aniquila todo mal.
Esa es la confianza de María, desde la que grita que SÍ al mundo, la que hizo posible que Dios transformara para siempre la historia y lo que somos cada uno de nosotros.

¿Qué mayor alegría podemos tener? ¿Qué mejor legado para ofrecer? ALABAR, BENDECIR Y PREDICAR,  uno de los lemas de la Orden.
Supongo que pegaba más que esto me hubiese sucedido el viernes, cuando celebraremos la anunciación… pero el caso es que me ha pasado hoy y he tenido que elegir entre el calendario y la vida, tal como llega… ¡he optado por la vida!
Esta noche me apetece compartir el enlace de esa canción que hoy me ha acompañado y la letra en español.
MAGNIFICAT DOMINICANO
Magnificat, Magnificat,
Anima mea, dominum (bis)
Bendecid, bendecid al pueblo de Dios.
Bendecid, bendecid el nombre del Señor.
Todos los pueblos me dirán bendita:
se fijó en la sierva del Señor.

Predicad, predicad la palabra de Dios.
Predicad, predicad su verdad en la tierra.
Enséñanos a seguirle y muéstranos su camino
porque santo es su nombre. Amén

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