martes, 5 de abril de 2011

4 de abril. PARA SERVIRLE A VD.

Hay personas que, a veces, te tratan mal; uno va por el mundo queriendo estar disponible, ser útil en la medida de sus posibilidades; tratando de ser generoso y desinteresado con tu tiempo y, de vez en cuando, se topa con quien piensa que eres tonto (o menos listo que ellos) y abusa de ti.
No sólo te exprimen todo lo que pueden en su beneficio, sino que hasta acaban exigiendo tu servicio como si fuesen tus dueños…
No es nada que haya descubierto ahora, que no me caí del árbol ayer; tampoco este tipo de experiencias cambia mi forma de vivir, entender y ser… pero admito que me duele un poco, más si esas personas “abusonas” son gente de Iglesia, las que más y mejor deberían comprender mis planteamientos.
Nunca he sabido, y cada vez tengo más claro que tampoco quiero, poner “precio” a mi trabajo… pero reconozco que, ante estas situaciones, me gustaría sentir que se valora un poco más mi dedicación, mis esfuerzos, el trabajo, ¡soy humano!
Pero enseguida pienso en aquella invitación de Jesús a hacernos siervos, esclavos de los otros y en cómo, sin haberlo pretendido especialmente, con frecuencia me siento en esa situación; atendiendo antes las necesidades de todos que las mías… y resulta que así –aunque cueste creerlo-  soy feliz, que es verdad que eso te hace grande por dentro.

No falta quien me dice que espabile, que me aprenda la lección, que ponga condiciones a mi entrega; verdaderamente no quiero decir que haya que consentir que los unos abusen de los otros, todo lo contrario, creo que es necesario hacerles ver su actitud, humanizarlos… pero nunca “escarmentar”, si eso significa que dejas de confiar y regalarte;  porque eso es como dejar que sean ellos los que determinen tus opciones y tu forma de querer vivir el evangelio.
Por otro lado, esos de tendencia “explotadorcilla” no son la mayoría, abundan mucho más los que acogen al otro siempre como don, los que te regalan a ti también todas las maravillas de su corazón.
Así que eso es lo que quiero ser “de mayor”: más y mejor esclavo del ser humano.
Creer, como dice una canción que me encanta, que en medio de un mundo de apresados, por una falsa concepción de la libertad, es posible ser LIBRE; ¡NIÑO en un mundo de viejos!.

3 comentarios:

  1. Gracias amigo por no caer en el juego.
    A veces la misión se hace difícil. Mostrar su rostro a quiénes creen verlo es una de las tareas más titánicas. ¡Hay tantos fariseos!, tantos hipçócritas que se siguen sirviendo del Templo.
    Pero somos más, aunque no se note, los que queremos seguir anunciando al Señor de la Vida, sembrando Esperanza, viviendo en la Justicia y el Amor.
    Es tan grato sentirnos acompañados.
    Un abrazo inmenso,
    Pilar

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  2. Hoy mismo me hago seguidora de tu blog, que mi hermana Olivia me recomendó como buena estudiante de arte, y como integrante del grupo de catequesis.
    Un saludo y nos vemos mañana :)
    Paloma.

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  3. la grandeza del cristiano no consiste en ser, que eso es facil, lo importante es sentir.
    no permitir que entre en nuestro corazon ese veneno que lo que consigue es dar la infelicidad es lo que importa,
    la actitud de entrega desinteresada es el reto,
    conseguirlo, BENDICION DE DIOS

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