sábado, 12 de enero de 2013

12 de enero. QUERIDO RAFA


Hoy he tenido el inmenso placer no sólo de de administrar a mi sobrino el sacramento del bautismo, sino que además he podido ser su padrino. Desde aquí comparto con vosotros la carta que le he escrito y que me servía de homilía en la celebración:
 Querido pitufo,  ya llegó el día de tu bautizo y aquí estás tú: has tardado en venir; más de uno y de una te llevaba esperando mucho tiempo; también nos asustaste un poco al llegar, pero todo se nos olvidó en cuanto te vimos con esos ojazos tan abiertos.

Aquí estás tú; eres biología y química, sí, también psicología, sociedad e historia… pero no eres sólo eso… Basta con darse cuenta de la forma con que tus dedillos, tan pequeñitos aún,  alcanzan lo más profundo de cualquier alma; el modo en que tu  frágil sonrisa llena de fortaleza a todos los que la miran… tú eres mucho más, tú eres todo un milagro; eres magia y misterio; eres gracia, don, eres – como lo es cada vida- un regalo precioso que Dios nos ha hecho.

Puede que dentro de ese corazón que aún nos resulta tan desconocido aún te acuerdes de Él, de cómo es, de la manera en que te ha ido formando entre sus brazos de amor y preparando para mandarte hasta nosotros.

Y llegas hasta esta familia con otro regalo más…. En cuanto apareces se nos olvidan las preocupaciones; el brillo de tus ojos cuando te embobas mirándonos  nos llena de paz; cada una de tus sonrisas enciende nuestra esperanza y  cuando nos agarras de la mano se marchan todos los miedos… te llamas Rafael, “medicina de Dios”, ese otro regalo es tu propia vocación; el sueño que Dios tiene para ti y que aún desconocemos; una aventura que se irá revelando conforme la vayas haciendo vida.

No sabemos cómo será tu vida, en qué mundo tendrás que moverte el día de mañana, las alegrías y los problemas que el futuro te traerá; pero queremos que –pase lo que pase- estés bien; que tu vida tenga sentido y que –ni en lo bueno ni en lo malo- pierdas nunca la felicidad.

Por eso estamos aquí esta mañana; porque tus padres también quieren hacerte a ti otro gran regalo; en tu nombre quieren aceptar esa vocación; dicen que sí a Dios en tu lugar; te ofrecen el legado más valioso de la familia…. Una herencia que viene pasando de padres a hijos desde hace más de 2000 años…. la confianza de tus mayores en la vida, en el ser humano y en que la victoria siempre será del bien.

Decimos que sí contigo: que sí al amor; a la justicia; a la paz; a la esperanza de que mañana construyáis un mundo distinto y mejor… un mundo del que tú eres, sin duda, un protagonista importante, aunque aún no sabemos cómo, habrá que seguir esperando un poco más….

Hoy comienza a hacerse realidad en tu vida ese sueño de Dios, un camino que vas a empezar a recorrer de la mano de tus padres pero que después tendrás que continuar solo… bueno, solo no; de solo nada…. Tus padres seguirán contigo; también tus padrinos y el resto de la familia y amigos…. Estemos donde estemos, porque realizarás el viaje de la vida siempre en familia; con la Iglesia de aquí y la del cielo.

Es la única forma de alcanzar la meta; caminar juntos, en comunidad, en amor; en un amor de verdad: que no manipula ni te amarra, sino que libera, que es capaz de abrir la mano y dejar que marches o te equivoques; que es opción, sacrificio….que no se cansa de esperar, de perdonar, que no pone condiciones ni precios…. Ese amor que todos queremos darte; en el que nos gustaría que crecieras; el que deseamos que aprendas a agradecer a Dios y ofrecérselo a tus hermanos.

Ese amor es Dios mismo que, por supuesto, siempre te cuidará; al decirle que sí desde hoy él te une tan íntimamente a si mismo que te hace ser parte de Él y el mismo se hace parte de ti…. Se quedará contigo y jamás te abandonará… siempre te ayudará si tú quieres, cuando se lo pidas.

 Estás aquí Rafael, hijo, hermano, nieto, primo, sobrino….hecho una criatura nueva en libertad, comenzando una nueva vida, la vida en el Espíritu… y nosotros, los que estamos también aquí, contigo, te deseamos, para esta historia de amor que hoy comienza a escribirse, todo lo mejor.

3 comentarios:

  1. Hola Félix.
    Muchas felicidades para tu sobrino y para ti. Cada vez que vengo aqui me doy las gracias a Dios por tener te como hermano e como amigo, un grande predicador del Amor de Dios.
    Un abrazo muy fuerte, te quiero desde el hondo de mi corazón in Dios.

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  2. La alegría te reboza,me alegro y muchas felicidades para toda la familia.Un beso.

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  3. Félix,precioso regalo de entrada a tu ahijado...vaya homilìa cargadita de belleza;de sabiduría,de sentimiento...de AMOR. Sólo sé que el camino q hoy Rafa comienza estarà cuidado con tus manos y guiado por tu sensatez, sabidurìa,cariño y FE.
    Eso a nosotros nos da mucha esperanza y mucha tranquilidad. GRACIAS HERMANO FÉLIX

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